Seguidores

domingo, 16 de marzo de 2014

Mi Bello Amigo.



Cuánto amo tu nobleza tu porte y majestuosidad
cuando inicias ese tu baile te quiero a rabiar.
¡Y lanzo mi cante al viento bailas y bailas con armonía
entiendes lo que te canto y eso te alegra tanto
que me sigues al compas!
De terciopelo esa piel, tu crin ejecutando tu danza parece flotar
mientras tus grandes ojos brillantes me miran en un acto de complicidad.

¡Qué unión más bonita! Tú fina estampa se engrandece cuando
escuchas mí cantar, coronando un cielo de estrellas que alegre se unen sin dejarte de contemplar.
Ya anocheció mi fiel caballo, mientras te abrazo la luna ilumina tu cara
agradecida a ti me abrazo, mientras te acaricio te digo:
¡Gracias compañero por tanta belleza por tu nobleza por esa lealtad, tu sí que sabes de cariño y amistad!
Y giras tu cabeza al compas del silencio en un acto correspondido
acto de nobleza generosa tu estirpe siempre agradecida a quienes bien os tratan, sois una raza noble, quien bien os cuide un amigo por siempre tendrá, alegre y leal.
(Sencillas son mis palabras, pero no por ello carente de admiración
salen de mi alma para ti y tu raza, aunque sé que os merecéis mucho más)
¡Cuánto te quiero, pura tu alma bella tu estampa, sin rumbo fijo
contigo quisiera galopar y galopar sin fin, sin mirar atrás unidos para
perdernos en el infinito...más allá de la eternidad.


Mª José Ferrer González.
® Reservado todos los derechos de su autor